Como pediatra especialista en neurodesarrollo, a menudo me preguntan sobre los andadores para bebés. Seguramente muchos de nosotros, cuando éramos pequeños, usamos un andador para empezar a andar. Esos asientos con una especie de barandilla alrededor y anclados en unas patas con ruedas, que permiten al bebé moverse sin caerse. Sin embargo, en los últimos años, muchos pediatras han empezado a cuestionar si los andadores son realmente una buena herramienta para ayudar a los pequeños a dar sus primeros pasos.

Los Desafíos de los Andadores para Bebés
Algunas teorías sugieren que los andadores pueden deformar los huesos del bebé y retrasar su desarrollo a la hora de andar. El uso continuado del andador no es positivo para el bebé. Para empezar, el bebé no usa los brazos al moverse, lo que no le ayuda a equilibrar su movimiento. Además, le acostumbra a caminar de lado, en vez de frente.
Es importante recordar que no se puede dejar que el bebé use el andador sin que un adulto lo controle. El andador le da al bebé una sensación de libertad que puede llevarle a intentar cosas que le pueden resultar peligrosas, como bajar unas escaleras.
El Lado Positivo de los Andadores para Bebés
A pesar de estos desafíos, el andador no es completamente negativo para el bebé. Si se usa de manera puntual, como una distracción, se convierte en un juguete divertido para nuestro bebé, que le permite estimular sus ganas de descubrir el entorno que le rodea.
Para los bebés muy activos, el andador puede ser una manera de hacerles liberar energía, moviéndose por su pequeño ‘mundo’ y descubriendo todo su alrededor.
Desarrollo Motor Normal de un Bebé
Los movimientos que realiza un bebé van desde lo más simple hasta lo más complejo. El desarrollo de las habilidades de un bebé se da en un orden determinado, pero éste depende de las habilidades, intereses y motivaciones de cada niño. Podemos dividir el desarrollo de éstas habilidades en 2 fases:
Primera fase
Conductas reflejas. Los primeros movimientos de un bebé son reflejos. Los reflejos son respuestas automáticas e involuntarias que realiza un bebé ante determinados estímulos.
Tienen dos propósitos: el primero es adaptarnos al medio que nos rodea para sobrevivir, y el segundo es prepararnos para el control del movimiento funcional. Los reflejos tienen una duración y aparición determinada, aunque ciertos reflejos perduran toda la vida. Aquel reflejo que no aparezca, sea irregular o se prolongue más allá de lo que debería puede poner en manifiesto una alteración en el desarrollo normal del bebé.
Segunda fase
Habilidad de movimiento rutinario. Después del nacimiento comienzan a desarrollarse habilidades mucho más complejas, voluntarias, con mucho más control y precisión, gracias a los movimientos que el niño ha iniciado en los primeros meses.
Los reflejos de supervivencia van desapareciendo poco a poco, y le dan paso a reflejos más complejos como las reacciones de defensa, que permitirán mayor estabilidad y una correcta alineación de la cabeza en el espacio.
¿Cómo el Andador Afecta el Desarrollo del Bebé?
Si nos fijamos bien, la mayoría de los estímulos que recibe el cerebro del bebé provienen de las manos y los pies. El cerebro los codifica y los procesa para generar y guardar los patrones de movimiento. Además, el bebé debe luchar en contra de la gravedad para poder lograr la bipedestación. La gravedad representa una resistencia en contra del bebé. Nuestro cuerpo tiene la capacidad de soportar progresivamente resistencias cada vez más grandes, por lo que es una ventaja que la gravedad no varíe: el bebé va a desarrollar poco a poco su condición física, adaptándose a una resistencia que es constante.
La colocación del bebé en el andador representa entonces una barrera: los estímulos de las manos y los pies no viajan correcta o completamente al cerebro y la gravedad se anula (no aprenden a caminar, sino a desplazarse), por lo que no se desarrollan ni los patrones de movimiento correctos ni la condición física, y puede producir un salto en las etapas del desarrollo motor. También se ha encontrado que los andadores producen alteraciones físicas como pie plano (debido al poco contacto de la planta del pie con el piso y la alteración de la descarga de peso normal en el pie), deformaciones en las piernas (debido a la separación exagerada constante y prologada de las piernas) y deformaciones en columna (ya que después de un rato el bebé se cansa, reposa en el asiento de la andadera con los pies cruzados y la espalda curveada).
Preguntas Frecuentes sobre Andadores para Bebés
¿A qué edad puede un bebé usar un andador?
Los andadores suelen ser utilizados por bebés de entre 6 y 15 meses. Sin embargo, es importante recordar que cada bebé es diferente y que lo más importante es que el bebé pueda mantener la cabeza erguida por sí mismo y que sus pies toquen el suelo cuando esté en el andador.
¿El uso del andador puede retrasar el aprendizaje de caminar del bebé?
Algunos estudios sugieren que el uso del andador puede retrasar el aprendizaje de caminar del bebé, ya que le permite moverse sin tener que aprender a equilibrar su cuerpo. Sin embargo, hasta el momento no ha sido comprobado.
¿Es seguro usar un andador para bebés?
Los andadores pueden ser seguros si se usan correctamente y siempre bajo supervisión. Sin embargo, es importante recordar que no se debe dejar al bebé solo con el andador, ya que puede llegar a lugares peligrosos, como escaleras o cocinas.
Conclusión
En conclusión, el uso del andador debe ser puntual a lo largo del día a día del bebé. El pequeño puede divertirse montando un rato en el andador y moviéndose con cierta libertad por la casa, pero también es esencial que aprenda a gatear, a ponerse de pie, y que experimente el movimiento agarrándose a los muebles o a las manos de sus padres para andar.
Como siempre, es importante recordar que la seguridad del bebé es lo más importante. Nunca debemos dejar a un bebé solo con un andador y siempre debemos estar pendientes de él.
Si tienes más preguntas sobre este tema o cualquier otro relacionado con el desarrollo de tu bebé, no dudes en reservar una consulta conmigo, la Dra. Davinia. Estoy aquí para ayudarte a navegar por esta maravillosa aventura que es la crianza de un hijo.
¡Nos vemos en el próximo artículo!
Dra. Davinia García, Pediatra con Alta Especialidad en Neurodesarrollo Infantil.
Bibliografía, por que aquí siempre nos basamos en la Ciencia 🤓
"Baby Walkers: A Dangerous Choice." Mayo Clinic, Mayo Foundation for Medical Education and Research, 21 Feb. 2020, www.mayoclinic.org/healthy-lifestyle/infant-and-toddler-health/expert-answers/baby-walkers/faq-20058225.
"Baby Walkers: What's the Big Deal?" CanChild, McMaster University, 1 Oct. 2018, www.canchild.ca/en/resources/235-baby-walkers-what-s-the-big-deal.